Casa Lumpen y la Asociación Platense de Inquilinos: dos entidades que luchan por los derechos inmobiliarios.
Por Gustavo M. Barrón
Martín “Tincho” Pasos en su despacho de Casa Lumpen
A una cuadra y media de Plaza Rocha de la ciudad de La Plata, sobre la calle 59, se
encuentra “Casa Lumpen”, ex Alianza Francesa, organización que difundía la
cultura francesa en la capital de la provincia.
Su estructura es de las más bonitas del barrio, ya que su
fachada está pintada de colores llamativos, como el rojo y el amarillo. La
puerta entreabierta logra que se pueda observar un cartel donde dice “Casa
Lumpen, Centro Cultural y Productivo invita Ciclo de cine canábico” y al fondo
otro que dice “Cantina” (Delicias Populares). Un Luca Prodan a la derecha en el
hall central hecho por el artista local “Falo-papas” da la bienvenida a la
casa.
Dos parejas tomando un refresco se ven en las mesas hasta
llegar a la barra, y el tercer cartel te ofrece bebidas varias y menús clásicos
para el arte del buen comer.
Martín Pasos junto a dos amigos atienden el lugar, que
ofrece la bebida en su punto justo.
-Hola ¿Tincho?
-Sí. ¿Qué tal? ¿A vos te mandó Mariano? Ya sé por qué tema es,
ya estoy con vos.
Tomamos asiento y mediante su cena (ensalada de zanahoria y
huevo duro), nos cuenta sobre el trabajo que están haciendo para renovar el
alquiler de la casa.
-Estamos haciendo una movida juntando firmas para que
declaren de utilidad pública la casa y así poder conseguir la renovación del
alquiler.
Un gran trabajo de mantenimiento. Pusieron a la casa en
funcionamiento y en ella se pudieron hacer fiestas, shows y hasta funciona una
radio, que lleva el nombre de Radio Lumpen.
En el primer año se llegó a un acuerdo con los dueños para
no pagar el alquiler, ya que los gastos que necesitaban para los arreglos
costeaban la circunstancia.
El problema de
alquileres en la ciudad llevó a Martín y sus compañeros a realizar una
convocatoria para frenar la baja de los alquileres y parar el abuso de las
inmobiliarias “ponen un montón de condiciones y recargos” agrega, la idea era
crear un organismo dentro del municipio que las regule.
Tomaron contacto con el A.P.I (Asociación Platense de
Inquilinos), juntos marcharon con la máscara de Don Ramón, el personaje de la
serie “Chespirito”, de plaza Rocha a Plaza San Martín y se entregó un petitorio
a
“En la economía Argentina hay dos dólares, uno oficial y
otro blue, eso planchó el mercado inmobiliario” y eso generó un mercado en
negro, siguió agregando.
Se escucha de fondo el programa de Boca que sale los martes
por la señal que va por internet y en otra pieza dos escritorios con
computadoras dan el toque empresarial.
Terminando la comida sigue comentando que el A.P.I ya había
presentando un proyecto con algunos diputados del Frente Amplio Progresista en
el Congreso y remata que “el poder de lobby que tienen las inmobiliarias es
terrible”.
Habla sobre el “Plan Procrear”
diciendo que no alcanza a cubrir mínimamente, ya que dio la solución a una
parte del sector de la clase media, y el gran grueso de la gente todavía no
pudo acceder por cuenta propia a una propiedad ni un crédito.
Los alquileres se manejan de cierta forma ya que las
propiedades son inalcanzables y va generando nunca terminar de pagarlo y seguir
siendo un inquilino toda la vida. La legislación de la ley, regularla para
terminar con la especulación y luego dar la solución al problema habitacional.
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